Suena como una rata gigante advirtiendo de un peligro mortal
Un nuevo invento sueco ha cambiado la forma de combatir ratas y ratones. Investigadores de la Universidad Tecnológica de Luleå (LTU ) han conseguido recrear las señales de alarma naturales propias de las ratas, sonidos que asocian con un peligro extremo.
Para las ratas, suena como si una rata gigante avisara a toda la manada de una amenaza mortal.
¿El resultado? Su instinto ancestral se apodera de ellos y huyen para salvar la vida.
- Lo que hacemos es hablar el propio idioma de las ratas. Para ellas, suena como si se acercara un animal mucho más grande y peligroso. El instinto es tan fuerte que no se atreven a quedarse atrás, explica Örjan Johansson, catedrático de acústica técnica de la LTU y director de la investigación.
La nueva tecnología, llamada Repello , ofrece a los propietarios suecos una forma nueva, no tóxica y eficaz de proteger sus hogares, justo a tiempo para la época en que los problemas con las ratas estallan cada año.
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Cuando llega el otoño, empieza la temporada de ratas
Cada otoño los problemas aumentan drásticamente. Con la bajada de las temperaturas, ratas y ratones buscan calor y comida en casas, garajes, sótanos y trasteros.
Esto conduce a:
- Cortar cables eléctricos: riesgo de cortocircuitos e incendios.
- Alimentos estropeados en despensas y almacenes.
- Enfermedades y parásitos que pueden infectar tanto a humanos como a animales domésticos.
- Olores desagradables procedentes de la orina y las heces.
Una pareja de ratas puede multiplicarse hasta cientos de individuos en un año. El problema crece rápidamente si no se ataja a tiempo.
Repello: la alternativa no tóxica que se agota
Repello es el primer ahuyentador de ratas del mundo basado en una eficacia probada mediante señales de alarma naturales. A diferencia de los dispositivos ultrasónicos estándar, a los que los roedores se acostumbran fácilmente, Repello utiliza una cámara de sonido patentada que es hasta 30 veces más fuerte y, por tanto, significativamente más eficaz.
El dispositivo no requiere productos químicos ni mantenimiento: simplemente se conecta a una toma de corriente y protege hasta 40 m².
El interés fue enorme de inmediato: en el momento del lanzamiento se vendieron más de 5.000 unidades en sólo dos días.
